Usted podría pensar que Patty Castillo sigue siendo la misma, pero no, cambió espiritualmente pues regresó a la casa de Jesús desde hace 7 meses. Durante la Joranda Mundial de la Juventud se le vio trabajando y pudo tomarse su selfie con el papa Francisco. Y aunque no es una imagen de alta calidad, como las que acostumbra a subir, compartió su historia en redes sociales.
Pensó que estaba peleada con Dios
Ella pensaba que estaba peleada con Dios cuando en verdad estaba peleada con las normas de la iglesia. Le dolía pensar que después sus fracasos, "la iglesia en cierta manera me echaba a un lado, no podía comulgar y eso me hacía alejarme de la casa del Señor". Pero cuando asistió al retiro de Emaús, comprendió que su relación con Jesús y María iba mucho más allá, desde ese momento ha "disfrutado como su hija visitándolo los domingos en la misa, comulgando, en el santísimo cualquier día de la semana y alabándolo en mi carro".
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Cambio espiritual
Su cambio fue espiritual, sigue siendo la misma. "Sigo siendo la misma Patty mal hablada, la que va a la playa en bikini, la que se toma una pinta bien fría, la que baila reguetón y trabaja en TV hablando locuras"... Pero ahora convive más con Jesús.